Defendiendo al indefendible

Por Jorge Peña Villalona

Dice una máxima del derecho que “todo el mundo es inocente hasta que se demuestre lo contrario”. Pero sucede que, en muchas ocasiones, la culpabilidad del acusado lo hace cometer un error tras otro en su misma defensa que termina hundiéndose el mismo por sus mismos medios, o bien, queda evidenciado por la mala calidad, la falta de argumento y la arrogancia ya sea del acusado como de sus defensores, que no sólo es culpable, sino que se cree y se siente por encima del proceso, por encima de las leyes, por encima de Dios, por encima de todo.

A propósito de la querella interpuesta por el Dr. Guillermo Moreno contra el ex presidente Fernández y la fundación Global Democracia y Desarrollo -Funglode-, la Fiscal del Distrito Nacional, la magistrada Yeni Berenice Reynoso, solicitó a las partes para una “vista” de la querella el pasado viernes 5 de abril.

“El que nada debe, nada teme” o popularmente “¿Cuál es el mieo?” como se diría en el Cibao.

Pretendiendo defender al indefendible, alguien publicó un artículo en un diario nacional que lejos de ayudar a su defendido lo hunde mucho más de lo que ya está. Fíjense como analizaremos los principales párrafos de ese artículo, para que vean como se puede acabar con la moral de alguien pretendiendo defenderlo de esta manera, veamos: (en cursiva veremos los párrafos correspondientes al artículo al que hacemos referencia).

“Hay dos figuras perniciosas que suelen aliarse para dañar: la calumnia y el protagonismo infame...

La señora fiscal de Distrito Nacional, en vedetismo impropio de su rol, se ha juntado con la infamia de Guillermo Moreno para pretender humillar al doctor Leonel Fernández. Cosa que jamás podrá lograr por carecer de estatura... Moreno, por supuesto.”

En este primer párrafo, el autor, lejos de siquiera valorar el procedimiento, que por demás es que estipula la ley, hace como todo aquel que no tiene argumentos: Se reduce a denostar a la parte que considera agresora.

Y continúa diciendo:

“Porque sólo citar a Leonel a una “audiencia pública”-- así se llama la corte de Tres Patines-- para ventilar una burda infamia, es una falta de respeto de la señora Reynoso que debería ocupar su tiempo en asuntos más provechosos para el Ministerio Público. Que buena falta le hace.”

Queda claro,que el autor, al parecer, conoce mejor que la misma fiscal el contenido de del documento sustentado por la parte querellante, ya que lo califica como una burda infamia, pero se le escapa, que la persona con la potestad para decidir eso es la Magistrada Yeni Berenice Reynoso, a la que el mismo autor de manera despectiva llama “la señora Reynoso”.

Sigamos leyendo:

“El propósito es provocar titulares con Leonel acudiendo a la corte, algo que no hará porque ninguna ley lo obliga. Bastaría que vayan sus abogados, como en efecto ocurrirá.

Pero de entrada se deja la impresión de que Leonel ha sido citado por la Justicia-- algo absolutamente falso--, y de esa forma se despachan informaciones igualmente falsas a la prensa internacional”.

Este párrafo, lejos de ayudar, desayuda mucho a su defendido. Yo me pregunto, para una persona inocente, ¿qué peligro puede significar el ser requerido por la justicia? No sabemos ¿cuál es el problema con que un inocente acuda a la justicia? Recordemos que en una ocasión Leonel Fernández se presentó ante la fiscalía durante el gobierno de Hipólito Mejía y no recuerdo que se le haya caído ningún brazo por eso. Lo que pasa es, el terror es, que en aquella ocasión acudió porque sabía que aquello no tenía sustancia jurídica, lo que ahora no ocurre, ya que estamos ante una acusación seria, responsable y por demás sustentada, entonces, si es inocente, ¿Cuál es el miedo?

Continuamos…

“En el exterior se crea la confusión de que el expresidente dominicano ha sido llamado por la Justicia para que responda por actos de corrupción en su gobierno, y eso es justamente lo que buscan los enemigos de Leonel.

Por supuesto, los titulares confunden y en lo que se aclara todo se mella la imagen de la figura más descollante de la política dominicana y uno de los líderes sobresalientes de la América Latina".

Si usted no quiere que algo se sepa, sencillamente no lo haga. Si usted no quiere que al culminar su gobierno lo llamen para aclarar nada, pues sencillo: DEJE TODO CLARO. El expediente depositado contra el ex presidente Fernández, lejos de ser una “infamia” contiene toda la sustancia que se necesita para encausar una investigación. Pareciera, leyendo las palabras del autor, que “El figurín figurado de la persona en cuestión no debe ser deslucido ni con el pétalo de una rosa”, si ese era el caso, entonces era la misma figura la que debió exhibir un mejor manejo de la cosa pública.

¿Es necesaria tanta iniquidad para defender a un “Inocente”?

Este artículo continúa…

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